Ella es


Ella es la sonrisa perfecta.

Ella es la esperanza en la oscuridad.

Ella es la virtuosa mano que se extiende para levantar al que tropieza en el camino, invitándole a un nuevo comenzar. 

Ella es ella y no existe una similar réplica.


Ella no tiene pares, ¿quién podría hallarla entre millares?


Ella es el mejor de los amaneceres, contemplar la luz del sol iluminando su rostro no tiene igual.


Ella es dulce y en ocasiones agridulce.


Ella es oído, porque valora el saber escuchar.


Ella sabe endulzar las tardes amargas y colorear con sus palabras los instantes descoloridos.


Ella es la pausa que necesita un ansioso.


Ella es reflexión que requiere un impulsivo. 


Ella es la mirada que sostiene la observación.

Ella que con sus manos aferra las palmas sudadas de quien lucha con los miedos.

Ella que con sabiduría conduce las rupturas de las estructuras, explicando suavemente con la paciencia que requiere tan osada acción. 


Ella es el abrazo que sostiene al diluido. 


Ella es el silencio que necesita el sensible a los ruidos.


Ella es la lógica que urge al emocional para poder contar sus pasos.

Ella que logra enseñar que un poco de desorden no es necesariamente un caos.

Ella es la abertura al mundo de conocer y darse a conocer.

Ella es la alegría que alimenta al corazón, que en muchas ocasiones se desalienta en las duras luchas del vivir.


Ella tiene esos brazos que saben acoger al que experimenta los distantes desprecios de los insípidos habitantes del concreto.


Ella acompaña en los vacíos de los indolentes. 


Ella sostiene en sus hombros al doliente.


Ella agradece los detalles que sostienen los grandes momentos.


Ella sabe esperar que la luna llena vuelva con su esplendor ha iluminar las frías noches de invierno.


Ella mantiene encendida la esperanza en que El dador de vida les sostendrá en las dificultades en este lado de la existencia.


Ella sonríe con una honesta y humilde sinceridad, que difícil es encontrarla en medio de la soberbia reinante. 


Ella contiene la paz en las jornadas conflictivas , la felicidad en las praderas y la fe en las tormentas que agobian el alma.


Ella es el reflejo de la noble bondad.


Ella enseña con sus pasos, las palabras son las sombras de aquello que modela con sus acciones. 


Ella es la expresión del amor, que sabe entregar perdón cuando la imperfección se manifiesta.


Ella disfruta los banquetes y se deleita con profunda gratitud en la estrechez.


Ella es amiga, compañera, complice, hermana, esposa, mujer, vida y libertad.


Ella es ella, sin querer modificar su forma o adoptar lo que ella no pretende alcanzar.


Ella es esencialmente hermosa, sin presumir su naturalmente dulzura.


Ella es el bienestar de la gracia que sin merecerlo se recibe.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Pensamientos trazados

La Ingratitud

Algo o alguien